Los amantes del vino están de suerte. Si el vino de Tenerife ya era lo suficientemente bueno para Shakespeare, ¡sin duda también lo es para nosotros!
Los visitantes primerizos se verán gratamente sorprendidos al comprobar que las Islas Canarias producen algunos caldos realmente excelentes. De hecho, son tan buenos, que la principal razón por la que no se ven muy a menudo en los supermercados foráneos, es que la demanda local es tanta que muy poco llega a exportarse.
Pero hoy en día, tal es el conocimiento y la apreciación de estos maravillosos vinos que un nuevo tipo de turismo está emergiendo: el enoturismo. Puedes tanto asistir a catas en bodegas locales como ir a visitar el Museo del Vino, donde descubrirás la fascinante historia de la elaboración del vino en las Islas Canarias además de salir un poquito alegre de allí. ¡Sólo asegúrate de no ser tú el que tiene que conducir!
Un poco de historia…
La vitivinicultura en Canarias comenzó en el Siglo XV, cuando se importaron las primeras viñas de malvasía desde Creta que fueron plantadas en Lanzarote y más tarde en otras islas.
El vino dulce Malvasía blanco, conocido en Inglaterra como “Canary Sack”, fue muy popular en Europa en el Siglo XVI, e incluso fue mencionado en algunas de obras de Shakespeare, como en “Noche de Reyes” (“te falta una copa de vino canario” – ¡una verdadera tragedia).
La conexión caribeña
Seguro que nunca se te ocurriría pensar que tu deliciosa copa de vino canario tiene en absoluto que ver con el Caribe, ¿verdad?
Pues resulta que sí. Cuando se decidió que España controlaría las Islas Canarias y los portugueses Madeira (Siglo XV), la tierra era barata por lo que pronto se establecieron las primeras plantaciones de azúcar para producir y enviar a Europa. Pero las exportaciones de Brasil y el Caribe al continente europeo crecieron de manera espectacular y, allá por el año 1650, el azúcar de estas regiones costaba la mitad que el canario. Esto hizo que la demanda de azúcar canario se redujese drásticamente, justo en un momento en que los precios del vino estaban subiendo. Así que muchos agricultores empezaron a destinar más tierra a plantar vides, lo cual provocó que la industria del vino floreciera.
¿Qué lo hace tan especial?
1. Yendo al grano, el clima. O, para ser más correctos, los distintos microclimas únicos que hay en Tenerife y en Canarias en su conjunto, y que son una combinación de sol, calor, tierra volcánica, su localización subtropical, el viento y la humedad desde el océano Atlántico.
2. Sorprendentemente, las Islas Canarias cuentan con la mayor variedad de uva originaria de las antiguas cepas europeas del continente. La mayoría de ellas no están injertadas, ¡lo que significa que pueden tener hasta 100 años de antigüedad! A diferencia del resto del mundo del vino, la plaga de la filoxera nunca ha sido un problema aquí. En el siglo XIX, la epidemia de filoxera destruyó la mayor parte de los viñedos de Europa, pero gracias a nuestro aislamiento geográfico Canarias no se vio afectada.
3. Otro punto muy interesante sobre la elaboración del vino en Canarias es la enorme cantidad de tipos de uva. Olvídate de las variedades internacionales más conocidas, o incluso los tipos más populares del continente. Aquí las principales uvas son Listán Blanco y Listán Negro. Otras variedades blancas son Albillo, Gual, Malvasía, Marmajuelo, Moscatel y Sabro. En uvas rojas están la Negramoll, Tintilla, Moscatel Negro, Prieto y Malvasía Rosada, pero todavía hay muchas más.
4. La mayoría de los vinos de Tenerife son blancos, con tintos en segundo lugar y los rosados en tercero, cabiendo destacar el vino Malvasía. Es la alta calidad y su sabor dulce lo que hizo que los vinos canarios fueran famosos en todo el mundo allá por el siglo XVI. Los niveles de producción son relativamente bajos, pero sin duda vale la pena probarlos.
Denominaciones de Origen (D.O.)
Las Islas Canarias cuentan con nada menos que diez D.O. que están reguladas y supervisadas, lo que garantiza una óptima calidad de uva y una correcta producción del vino. Cinco de ellas se encuentran en Tenerife, mientras que las cinco restantes se reparten entre Lanzarote, Gran Canaria, La Gomera, La Palma y El Hierro.
DO Abona
400 -1.700m
Sur de Tenerife. Cubre Adeje, Arona, Arico, Fasnia, Granadilla, San Miguel y Vilaflor.
Ejemplos: Flor de Chasna, Cumbres de Abona
DO Valle de Güímar
200-1,400m
Sureste de Tenerife. Cubre Arafo, Candelaria y Güímar.
Ejemplos: Brumas de Ayoza, Contiempo
DO Ycoden Daute Isora
50-1.400m
Punta noroeste de la isla. Cubre San Juan de la Rambla, Icod de los Vinos, Garachico, Buenavista del Norte, Guía de Isora, El Tanque, La Guancha y Santiago del Teide. Esta es la región por la que el vino canario alcanzó fama mundial en el siglo XVI siendo exportado desde el puerto de Garachico.
Ejemplos: Viñatigo, Miradero
DO Tacoronte-Acentejo
200-800m
Norte de Tenerife. Es la más grande de Canarias (aglutina el 20 % de la tierra productiva de las islas) y fue la primera en obtener el estatus de D.O. en 1992. También marcó las pautas a seguir para las demás denominaciones: todas y cada una de sus 40 bodegas cuentan con un moderno equipamiento y producen una muy alta calidad de vinos predominantemente tintos.
Ejemplos: Viña Norte, Monje
Valle de La Orotava
200-800m
Noroeste de Tenerife. Cubre La Orotava, Puerto de La Cruz y Los Realejos. Gracias a la menor altitud, las viñas están más protegidas de los vientos alisios. Una característica única de esta D.O. es el “cordón trenzado” – una cuerda hecha de ramas trenzando varias vides juntas, de longitud entre 3 y 15 metros. Este sistema permitió que las viñas se pudieran mover fácilmente, dejando libre el suelo para plantar las patatas, pero esto hace imposible la recolección mecánica.
Ejemplos: Tajinaste, Can
Rutas del vino
Tenerife tiene algunas rutas del vino fabulosas, donde se pueden visitar tanto las bodegas más grandes como las más humildes y familiares, catando a medida que avanzas algunos de sus mejores vinos. La Casa del Vino fue creada para difundir el conocimiento sobre la historia y la importancia de la vitivinicultura en Tenerife. Además, puedes catar vino de las 5 denominaciones en una agradable visita. El Baobab Experience Centre puede organizarte una excursión fantástica, donde podrás probar una selección de vinos diferentes, además de una degustación de quesos, mientras aprendes la fascinante historia del vino en Tenerife.
Reconocimiento Nacional e Internacional
La gran demanda local ha provocado que la mayoría de los vinos producidos en las Islas Canarias se consuman en la región. Sin embargo, en los últimos años, los vinos canarios han ganado gran número de seguidores en Europa, gracias a varios premios internacionales. Y al otro lado del Atlántico, el importador de vinos José Pastor, natural de Valencia, hace todo lo posible para promover los vinos canarios en los EE.UU. “La combinación de uvas poco conocidas, viñedos a gran altitud y sus dramáticos suelos volcánicos hace que sean de los vinos más característicos y deliciosos que he probado”, comentó.
No hay nada como la experiencia de primera mano, sin embargo, así que llena una copa y descubre más por ti mismo…
¡Salud!